Corazón sí que tenemos 
Hace un año:
— No vamos a ganar Lucía
– Claro, los otros padres son mayores y tienen hijas pequeñitas y muy monas.
– Además que nosotros tampoco bailamos muy bien ( en especial yo )
….
Después de ese primer concurso hemos participado en otros 3 o 4; y siempre cada vez que hemos ido, alguna vez nos pareció injusto que nos elliminaran; otras no tanto.
Pero nunca pensamos en dejarlo:
– Bailaremos en todos los concursos Lucía, aunque nunca ganemos…
…
Así que cuando he visto a los demás competidores le he dicho:
– Con fé Lucía, con fé
Visto que además me olvido siempre la coreo y para mí estoy dándolo absolutamente todo. Es decir, el momento del baile en la pista es un momento sublime, hermoso, feliz, de complicidad, de mirarnos, de disfrutar. Y nunca mejor que con mi hija y mi Gesica.
Pero una cosa es lo que siento y otra lo que ven los jueces:
– Con fé Lucía, con fé
….
Con fé llegamos a la final y en ella necesitaba sacar los pasos prohibidos para tener esa oportunidad de ganar.
No suelo hacer rodillas pq me salgo del tiempo del baile pero estoy zapateando con toda mi alma y con el corazón por la boca después de 5 marineras y me digo:
– Ahora!
Pam!!!!
Rodilla abajo
Y
La rodilla no sube porque el muslo no responde …..
Y
Me paro como un viejito y sigo bailando con lo último que me queda.
Al final del baile de la final:
– Lucía, lo siento, la he cagado…
Y los puntajes no los oí bien
Y se acercan las 2 parejas y les miramos extrañados
Y por los altavoces dicen:
– 1er puesto!!!!!!!
– Pareja 37!!!!!!
Y hemos ganado!!!!!!!!
He dado saltitos de alegría y he abrazado a Lucía muy fuerte, muy fuerte, muy fuerte. Creo que no hay nada que pueda explicar lo que siento al pasar este momento, al bailar con quienes amo como a nada en este mundo…
Y hemos sido felices
Y eso es la familia
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